Tras el hundimiento financiero que experimentó Islandia hace unos años no consigue levantar cabeza. La liberalización de su mercado financiero y la privatización de la banca en 2003 hicieron que las empresas islandesas empezasen a especular y a endeudarse en el extranjero. Ahora nadie puede hacer frente a la deuda.
Las multinacionales van huyendo poco a poco del país. Primero se fueron los principales grupos de inversión británicos, ahora es McDonlads.
La razón es que no resulta rentable importar carne desde Alemania a Islandia, que tiene unos aranceles muy elevados para proteger el comercio nacional, y vender después en la muy depreciada corona islandesa.
Creo que la salida de McDonalds del país es algo muy significativo que va más hayá de los hechos.
Se trata de todo un símbolo de la decadencia económica en la que se encuentra el país, en el que el modelo capitalista de especulación y deuda se ha llevado tan lejos que hasta su principal imagen ha decidido huir.
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